AH?!

-¿Quién es Gasset? —dijo el profesor segundos después de que Fulana terminara de leer.
Sin embargo, después de un silencio eterno y penoso de cuatro segundos…
-Un filosofo…— dijo él.

Ahora, yo me pregunto: ¿Dios todo poderoso se quiere reír de mi cuando dije que no creo que el hombre perfecto exista?
Me corto una bubi a que sí.
Good looking, rich, with car and brain… OMG! Las 4 grandes características que pocas veces conviven juntas en un solo cuerpo; pero parece ser que la naturaleza se digno a brindarnos este raro espécimen que solo nace uno entre 100000.
Un compañero de clases, tan pero, tan perfecto, y no exagero, que su sola presencia me produce mala espina. ¿Porqué? Simplemente porque creo que en cualquier momento me voy a enterar que el pana es una especie de robot que vino del futuro para joderme y hacer pensar.
Soy una mentirosa si digo que no me gustó a comienzo del año, ¿Quién no coño? Pero su rara perfección me daba tan duro en la cornea que se auto eliminó todas atracción existente en mi y empecé por tener curiosidad. Debía buscarle, siquiera, un defecto, UNO SOLO. Aun no doy con el susodicho, pero solo porque ya dejó de interesarme igual. Un cero a la izquierda. Yo de verdad me rehúso a ser como el montón empepado por el pana, el otro montón que lucha por ser parte de su sequito. Tengo muchas cosas más importante que hacer.
En más de una ocasión conversamos, es muy agradable y simpático (aunque muchos digan lo contrario, a mi me cayó bien), pero me di cuenta que yo, para ser alguien que se jacta de culta, estaba mucho más debajo de entender su poderoso y exótico léxico repleto de joyas de la lengua española.
Así que, luego de esto, solo tengo una conclusión: Sí, el hombre perfecto sí existe, pero te recomiendo que no te ilusiones mucho con él. Me apuesto a que su defecto es ese. Queremos a un ser humano y yo me vendo los ovarios a que mi compañero de clases está muy lejos de serlo…

PAZ!