30 abril 2010

Taller!!! VOL 1

Bueno bueno!!! Hoy, viernes 30 de abril, fue mi primer día de taller a la comunidad este año en el Olaso!
Aya ya y! que manía tengo!
Brinco y salto y no me detengo!
Yo tengo la manía de hacer así, de hacer así, de hacer así..!


Soy tan feliz de dar taller de teatro a los niños! It´s sooooo amazing!!! *0*
Y no es por nada, pero mi grupo "Las Estrellas del Olaso" se botaron solitos con la actividad de las fotografías, T.T estoy tan emocionalmente orgullosa! Ay! ya se me aguó el guarapo!
Culminando! creo que debo comenzar a aprenderme canciones de campamentos, es URGENTE O.O, de vaina y me aprendi la de la manía. Bueno, mientras que yo busco a mi enciclopedia ambulante de canciones de campamento... me ire, aun cantando:

Aya ya y! que manía tengo!
Brinco y salto y no me detengo!
Yo tengo la manía de hacer así, de hacer así, de hacer así..!

PAZ!

26 abril 2010

Hasta que yo demuestre lo contrario Vol II

Desahogo: momento crucial en el que quieres mandar a todos y a todo a la mismísima mierda.
Y así será hasta que yo diga lo contrario…


El día que alguien me diga que encontró en el supermercado cualquier línea para el cuidado del cabello completa, yo misma me inclinare a sus pies y le montaré un altar. Qué tiene en contra los establecimientos en venderme el producto completo sin que le falte el acondicionador o peor… el champú???


El otro día me enamoré de X marca al verla por la Tele. Me creí al pie de la letra el típico comercial que te pone cabezona y con piquiña por correr a la tienda más cercana y dejar un dineral ahí, solo por que viste a un esculturar y operada tipa con un precioso cabello que de seguro se ve así luego de tres horas postrada de culo en una incomoda silla, en manos de una loca, que a un ser tan corriente como tú le cobraría un riñón por el trabajito.


Y que te encuentras en la tienda? NADA. Vació, decepción y un frasco medio vació (el mismo que todas usamos como muestra gratis cuando el vigilante esta distraído).


Pues yo tengo el dato. Ser mujer, ser bella y ser aparentemente perfecta es meterse en un campo de batalla sangriento y sucio, lleno de actos insospechados y herejes. NOS FUERZAN A ASALTAR EL CAMIÓN que lleva el producto a las tiendas en la madrugada; no, peor, nos obligan a hacer cola!! A levantarnos temprano. Estoy clara que el rasgo típico y congénito de un Venezolano es hacer cola, pero esto es irse y salirse de la línea punteada.


PERO QUE NO CUNDA EL PÁNICO! Asi como Ciudad Gótica tuvo a Batman, nosotras tenemos a Farmatodo. Farmatodo, gracias por existir. Eres el Starbucks de artículos femeninos para el cuidado personal más genial de todos. Graciaaaas…


PAZ!

Y él dijo "bajense" y todas se cayeron al piso...

Las 10 cosas herejes que somos capaces de hacer para que no tengamos nuestro ansiado Felices para siempre…



Momento crucial en el que nos provoca gritarnos: Eres una repajua zorra inmunda. Y luego nos da ganas de gritarle a él: eres un soberano maricon triste, púdrete en el infierno y que un burro vaya y te goce, cabrón.


1.Levantarnos temprano, o sea: dos o tres horas antes de la hora habitual.
2.Hacernos cualquier tratamiento Transformer tortuoso e incomodo que se nos cruce por la mente.
3.Plancharnos la greñas.
4.Colocarnos aquellos hermosos pero incómodos los muy malvados zapatos que nos hacen ver más altas.
5.Cambiarnos de atuendo unas 30000000000000 veces, para al finas quedarnos con la primera opción.
6.Maquillarnos con suma precaución para quedar MÍNIMO como un Geisha y luego rosearnos con el mejor perfume que tienes, el mismo que te produce catarro…
7.Pagar un taxi para que tu look de divina no se estropee en una camionetica.
8.Ensayar como caminar, hablar, reír, respirar…etc.
9.Pasar hambre porque la falda nos aprieta la panza y debemos mantener nuestras pompis en alto.
10.Y por último… tener que utilizar toda nuestra fuerza Jedai para no hacernos flan frente a él.


Y para qué? Para que este soberano cabrón nos mire como si nada, no pegue una contigo y para colmo te pregunte si la chama Fulana Tal le gustaría salir con él..


LO JURO! El día que me encuentre a un hombre no sea tan remaricón, se me bajaran las misma pantaletas en el acto…

PAZ!

Cenicientos, sapos, bagres, calabazas... en este mundo hay que besar de todo para encontrar un principe!

Qué vaina con el ciego amor que me jode la paciencia!!

No te jode que todo el mundo arrugue la cara cuando muestras en publico el objeto de la mayoría de tus suspiros y con quien ya te estas planeando el cortejo y el ramo?
A mi me arrecha, pero más rabia da cuando de miope pasas a una perfecta visión 20/20 y te das cuenta que al lado tenía al bagre de los bagres. Ese es el punto que quizás nos haga tenerle miedo a la relaciones: darte cuenta muy tarde de que la cagaste y terminar por sentir pena ajena por ti misma.
Pero una cosa si es seguro, en toda relación siempre hay alguien más bonito (no diga que en TODAS, hay excepciones donde un par son equivalentes en todos los sentidos, casos extraños y poco usuales de la naturaleza) y si es así… Pues, da las gracias grandísima zorra inmunda qué ere tú! Y quizás así hasta pienses que le estas haciendo un favor al pobre feo; ahora todas se fijaran en él porque creerán que tiene carro, plata o hasta que lo tiene de oro y con sabor a chocolate.
Hay que darse su puesto, a veces me pongo a creer que el físico no lo es todo. Pero tampoco es para que nos salgamos todas de la línea punteada. SIEMPRE, nos merecemos mejores cosas, mejores tipos, yo aun no doy pie con bola pero me mantengo firme en mi búsqueda. Así que si te toca besar a un sapo que tu propia y perturbada mente lo convierta en príncipe, bien por ti sister. Pero, si el Ceniciento se convierte en calabaza antes de tiempo, no te des mala vida, recuerda dar las gracias y creer que le hiciste un favor.
SIN EMBARGO, si ese hechizo Harry Potteriano que le hiciste al pana perdura, pues ni de coña! Aprovéchalo y disfrútalo. Quién no dice que cuando se esta enamorada la vida es más sabrosa?!

PAZ!
Inspirado luego de cagarla magistralmente al fijarme en un GRAN bagre...

Orgullosa 100% de ser un cubito de colores con tetas..!

Las cosas que me hacen sentir orgullosa de ser como soy…aunque la mayoría de las veces me arreche y diga lo contrario…

1. Enamorarme de cada tipo medianamente atrayente que se me cruce por el frente…(Sea bonito, feo, gordito, falco, raquítico, papeado, buenote, horrible, punketo, emo, roquero, geek, con mucho pelo, con poco pelo, con cabello largo, con cabello corto, con gorra, sin gorra, con sombrero, con boina, a lo Pastor Oviedo, o de greñas asiáticas, chino, o que le digan chino, igualito a X actor, a X cantante, a X comiquita, con lentes, sin lentes, etc, etc, etc…)

2. Saber que si me arreglo para salir un día, ese DÍA no me voy a encontrar ni al polvo en el camino. Y si salgo como una loca, aparecerán hasta los que nunca veo solo para que me observen como un bagre. Y aun si, después de todo, seguir haciéndolo.

3. Darle por comer a hora imprevista todo lo que se me atraviese en el camino. Para más tarde ponerme a gritar como una desgraciada lo gorda que estoy y luego repetir el circulo.


4. Decir o hacer algo y a los cinco minutos (a veces segundo, depende de lo que haya echo) desea tener un maquina del tiempo por que la he cagado.

5. Sacarme y plancharme las greñas en una peluquería súper caché cuando todo el mundo sabe que esa semana va a caer el diluvio universal.

6. Visitar mil y un tiendas buscando X cosa y termino llevándome Y cosa.

7. Comprarme una blusa que nunca voy a usar porque en mi casa no me quedaba bien, a diferencia de la tienda donde me quedaba divina.

8. Quedarme con las ganas de zamparle un beso al Fulano Tal de turno para que no diga que soy una zorra, cuando eso a ellos no les importa.

9. Caerme en cada superficie estable, inestable, lisa, arrugada, con grama, sin grama, cemento, gravilla, piedra, etc, etc, etc…

10. Usar tacones, vestidos ajustados, faldas incomodas levanta pompis, depilarme las piernas con cera, también las cejas, recurrir a la depilación brasilera, gastar mi dinero en cremas, maquillaje y ropa nice, usar hilo y plancharme las greñas solo para verme divina ante todos los hombres (que nunca se darán cuenta) y las mujeres (para que se mueran de la envidia).

Soy mujer, y que?! Orgullosa 100% de ser un cubito de colores con tetas..!

PAZ!

25 abril 2010

Una serie de eventos desafortunados...

Todo artista, o toda persona que desee serlo, y que se dedique a escribir o crear cualquier tipo de literatura; tienen una imagen, un personaje y una estampa que se repite siempre cada vez que intenta crear algo. Algunos son más directos y terminan por escribir una serie. J.K. Rowling dio a luz a Harry Potter, Aghata Christe a Hércules Poirot, Anne Rice nos a trajo Lestad, George Simenon nos mostro más de setenta novelas policiacas con el mismo Comisario Maigret y etc, etc, etc.

Yo llegue un día y quise ser como ellos. No, en realidad vine un día, observe una hoja en blanco y me imagine a un hombre; no un hombre cualquiera, un hombre que me representara a mi misma. Suena raro, lo se; pero quise poder sentirme identificada con ese chico cada vez que escribiera de él. No puedo asegurar que aquellos escritores que nombres hayan tenido mi misma situación, pero me gusta pensar que así es. Después de todo, todo lo que creamos siempre tiende a poseer más de nosotros mismo que cualquier cosa.

Charlie López no tiene una edad definida. Solo me gusta variar y jugar con su vida, un día puedo convertirlo en un niño, a veces me pueda dar por hacerlo un adulto o quizás lo transforme en un anciano en los últimos momentos de su existencia; no importa el día y el momento en que Charlie viva, el es simplemente un reflejo de mi misma y no puede crecer.

Flaubert dijo un día: Yo soy Madame Bovary. Yo digo en este momento: yo soy Charlie López.

Chronicles of Charlie (Crónica de Charlie sonaba muy monótono para mi) surgió cuando me di cuenta de que tenía, por lo menos, tres historias a medio escribir y dos completas acerca de pequeños eventos desafortunados, lunáticos e increíbles que pasaron en la vida de Charlie. Los uní todos, pulí algunos, reescribí otros y aquí están:

*Casa de Verano

*Kilometro 43

*Sonrisas

*Línea #5

*Sanitario

Cinco lapsos en la vida de Charlie López. Quizás halla más, quizás en realidad no vuelva a escribir sobre él, pero lo que si es seguro es que la vida de este chico continua….con mi ayuda o sin mi ayuda…

Luna

La mejor tarea de todas mis tareas…

Luna

Era un señor muy barrigón que siempre cargaba un lindo reloj. Con dos orejas largas, y un par de enormes patas que nunca paraban de brincar, estaba llegando tarde al baile real.

Con su trompeta de oro y su traje de terciopelo, el Señor Conejo Blanco cruzaba la luna con mucha rapidez, no quería perderse el primer vals esta vez.

Era el primer día que su mamá lo dejaba ir solo sin que su hermano le estuviera llevando a toda partes. Ya no tenía porque preocuparse de que su hermano mayor le avergonzara con sus amigos, no señor, Joaquín ya había crecido, era un niño grande casi un adulto y podía sencillamente cuidarse solo, además, solo iba a casa de Samuel a jugar con su nuevo video juego que le habían comprando en su cumpleaños. Quince o veinte minutos de su casa a la de Samuel, no podía estar tan lejos.

Pero ya habían pasado más de veinte minutos y nada que llegaba a su destino. Qué raro, su hermano siempre tardaba cinco minutos en llegar a cualquier lugar, con el carro de papá por supuesto –el de el lo había hecho estrellar contra un árbol la semana pasada, y solo Joaquín sabía de ello-. Cansado ya de caminar, se detuvo en medio del camino para descansar un poco las piernas, esto de ir andando y ser un niño grande comenzaba a producirle dolor y arrepentimiento. A un lado del camino estaba un jardín, un enorme jardín con todo tipo de plantas y flores con un banquito de cemento en el centro de la grama. Joaquín se habría quedado tranquilo si no fuera porque un niña ocupaba el único asiento en toda la zona, mientras lloraba sin consuelo, con la piernas abrazadas y el rostro oculto entre ellas. “Las niñas son muy fastidiosas y problemáticas” decía Joaquín, siempre lloraban cuando él y sus amigos le jalaban los cabellos bien peinados con sus trenzas, ¿Cuál era el problema?, ellos solo estaban jugando.

Pero esta niña lloraba como si tuviera un terrible dolor de panza y Joaquín sabía muy bien acerca de los dolores de barriga, así que se preocupo un poco. Su cabello rubio estaba muy desordenado y su vestido azul sucio y arrugado, quizás esa era la razón: lloraba porque su mamá le iba a regañar, y Joaquín sabía también los regaños que uno podía recibir si llegaba a casa todo sucio y con la ropa arrugada. Sin embargo, la niña lloraba con un gran sentimiento que comenzó a incomodar a Joaquín, casi obligándolo a berrear de la misma manera. ¡¿Pero como se iba a poner llorar?! “Los hombres no lloran” le decía siempre su hermano cuando le cambiaba el canal de TV o cuando le escondía su DS. Decidido a acabar con esa situación tan pesada, se lanzo hacía el banco y jalo un poco la manga del vestido para llamar su atención. De inmediato la niña paro de llorar.

― ¿Por qué lloras niña? ― pregunto. La pequeña tenía unos enormes ojos casi como un cielo, una mirada penetrante e inocente que de inmediato se quedo fija en Joaquín.

Sintiéndose un poco tonto, Joaquín recordó que nunca antes había hablado con un niña y esta no ayudaba mucho al pobre al quedársele viendo fijamente.

― ¿Por qué llorabas? ― pregunto nuevamente.

― Perdí al Señor Conejo Blanco ― dijo con un suave vocecita.

― ¿Tú mascota?

― No, es un señor muy barrigón y siempre carga un lindo reloj.

― Entonces no es un conejo, es un adulto…

― ¡No, claro que no! ― grito escandalizada ― Es un señor muy barrigón y siempre carga un lindo reloj. Tiene dos orejas largas y unas enormes patas, nunca para de brincar y va directo al castillo de la Reina y no debe tardar.

Joaquín estaba confundido, no sabía en que pensar. Pero de lo que si estaba seguro era de que más nunca le hablaría a una niña, el tenía razón después de todo, las niñas son muy complicadas y chillonas, solo su hermano era capaz de aguantarlas hasta para encerrarse con ellas en su habitación cuando mamá y papá no estaban en casa.

― ¿Sabes donde queda la Luna?

― ¿La luna?

― Si la Luna. El Sombrerero Loco y el Conejo de Pascua me dijeron que ahí vivía. ¿Me puedes decir donde queda eso?

― La luna solo sale de noche niña, eso todo el mundo lo sabe. ― espeto molesto, esa niña se estaba burlando de el.

― Ya veo ― sin darse por avisada de que Joaquín no estaba ya muy contento con su compañía se levanto sonriente y sacudió el polvo de su vestido. ― ¿Cómo te llamas?

― Joaquín.

― Muchas Gracias Joaquín ― y sin más ni más, le zampo un beso en la mejilla.

Asqueado, sorprendido y contrariado, Joaquín se había ido de espaldas. Una niña lo acababa de besar.

― ¡Una niña me beso, una niña me beso, qué asco, qué asco! ― exclamaba.

Limpiándose el rastro dulce y tibio del beso en su mejilla, quiso gritarle y reclamarle, pero Joaquín estaba solo. La niña del cabello rubio había desaparecido.

――――

La señora mamá de Samuel los interrumpió justo después de haber matado al veinteavo zombi, sin contar a los extraterrestres. Su papá ya lo había ido a buscar.

Después de ese encuentro extraño con aquella niña, Joaquín había corrido a su casa sin perder más tiempo. “Las niñas no desparecen como fantasmas tonto” le había reclamado su hermano luego de que por su apuro en buscar ayuda y una explicación, había interrumpido su llamada diaria a la casa de su segunda novia. Pero Joaquín estaba demasiado asustado para creerle, el lo había visto con sus propio ojos, -bueno, no lo había visto en realidad- pero era imposible que la niña se hubiera esfumado tan rápido.

Casi obligado, Jáun no tuvo más opción que llevar a su hermanito a su destino. “Este no es el momento de ser un niño grande” Se repitió Joaquín, si su papá o su mamá o su hermano podían llevarlo a la escuela o a alguna otra parte, el lo iba a aprovechar, aun era demasiado pronto para ser un adulto.

Ahora, adormilado en el asiento de atrás del carro de papá, Joaquín esperaba con ansias llegar a su casa y echarse en su cama a dormir. Había sido un día agitado asesinando zombis y extraterrestres en casa de Samuel. Papá discutía con Jáun, ya se había enterado del accidente que dejo inservible su auto, pero estaba tan cansado que lo ignoro por completo. Miro por el vidrio el cielo nocturno y se encontró con la Luna.

Ahí la niña rubia le saludaba, a su lado estaba el Señor Conejo Blanco, un señor muy barrigón que cargaba su lindo reloj, con dos orejas largas y dos enormes patas, brincaba con apuro al castillo de naipes de la Reina, mientras la niña pequeña intentaba alcanzarle.


Lo sé, lo sé…Es una extraña tarea para serlo ^^.Pero yo no soy quien para reclamarle a la docente en la Uni… Agradezco que se tenga respeto a este relato tal como el que yo le tengo a las obras de los demas…